El cuidado postparto como una apuesta política

 

Autora: Manuela Montañez Guerra, Cofundadora BienParida

postparto.jpg

El ritmo vertiginoso de la vida moderna nos pone muchas presiones, no para y pone la productividad sobre todas las cosas. 

 

¿Pero que pasa si no paramos? 

El posparto, también conocido como cuarentena o la dieta en Colombia, es un periodo de adaptación que empieza inmediatamente después del parto y que se extiende el tiempo necesario (normalmente de seis a ocho semanas o cuarenta días) para que el cuerpo gestante, incluyendo las hormonas y el aparato reproductor se regulen y la psique y cuerpo emocional de la madre o persona gestante puedan incorporar su experiencia en el nuevo orden de vida. 

Es un periodo de tiempo en el que no solo el bebé sino también su madre/padre se enfrenta a una nueva vida. El parto es un proceso de transformación física, emocional y espiritual que trae muchos cambios y es necesario tomarse el tiempo de recibirlos y dejar que el cuerpo se recupere.

El cuerpo femenino y el de las personas con capacidad de gestar tienen la maravillosa facultad de crear vida. Pero como si crear y parir una vida fuera poca cosa, las mujeres y personas gestantes pueden llegar a sentir ansiedad al no sentirse productivas económicamente y “no hacer nada” por más de un mes. Pero el descanso después de aproximadamente 40 semanas de gestación es absolutamente fundamental para el bienestar. 

En la partería se contempla que los primeros 40 días después de un parto son sagrados, en donde se debe promover el descanso y el conectarse con el/la bebé. Este cuidado estricto durante el postparto esta relacionado a menores complicaciones en la salud de la persona gestante durante el puerperio y a tasas más bajas de muerte materno perinatal. 

Además una madre o persona con capacidad de gestar que logra descansar tiene menor riesgo de desarrollar depresión postparto y llega a tener una lactancia efectiva con menos complicaciones. 

Guardar la cuarentena no es cosa de abuelitas, es a mi parecer totalmente esencial desde un punto de vista tanto individual como social. Un menor número de complicaciones materno-perinatales le pone menos presión al sistema de salud, un mayor número de madres y personas con capacidad de gestar que logren hacer una lactancia materna exclusiva incrementan los beneficios en salud para estos bebés y además reduce significativamente los gastos alimenticios de las familias al no tener que comprar leche de formula. El número de madres que tengan apoyo durante el postparto y puedan descansar y recuperarse adecuadamente esta directamente relacionado al número de personas que pueden llegar a desarrollar depresión postparto. 

 

Podría seguir dando muchos ejemplos de como el cuidado postparto tiene implicaciones a nivel social e individual, pero quisiera enfocarme en el siguiente cuestionamiento: 

¿Qué podemos hacer como sociedad para fomentar el cuidado materno?

 

La maternidad es un tema de todes y desde un nivel individual podemos fomentar el cuidado materno analizando que podemos hacer para dar apoyo a las personas durante su puerperio. Podemos ofrecernos a hacer una visita funcional durante la cuarentena (en donde realicemos labores de limpieza, cocina, cuidado de hijos mayores y/o mascotas, escuchar las necesidades de la madre o persona con capacidad de gestar), llevar comida recién hecha y nutritiva para aliviar las cargas domesticas, apoyar económicamente para hacer que más personas tengan acceso a servicios de asesoras de lactancias, doulas, parteras, fisioterapeutas y otros especialistas. Podemos hacer incidencia política apoyando proyectos de ley que busquen extender las licencias de maternidad y paternidad, promuevan el parto respetado y la importancia del cuidado perinatal y que reconozcan la labor de las parteras y doulas (personas que trabajan incansablemente por la salud maternoperinatal y los cuidados postparto) y que su trabajo pueda ser cubierto por los sistemas de salud haciendo estos servicios más accesibles para las personas.

 

Creo fielmente que un buen comienzo de la maternidad, contenida y cuidada, es esencial para el bienestar general de nuestra sociedad por lo cuál nos incumbe a todes aunque aun no seamos padres o no deseemos serlo. 



 
Anterior
Anterior

La noticia que nadie espera

Siguiente
Siguiente

Desnormalizar la violencia en los servicios de salud